
Sol de diez esferas
Sueños cardinales
Curados insomnes
Llantos en el regazo de la madre
Riega tu alma con gritos de locura
Inunda tu cabeza con la agonía nocturna
Escucha la canción del velo
De los muertos que cantan
De un amor de una doncella artista de Cartago
Noches de sabiduría y prometeanos
Buen hechizo de librero
Tejedor de pureza
Aberrantes de lo inmundo
Mil espadas en mano bajo antorchas
Hasta altas cumbres
Piedra con corazón de arcilla
Y la luz de la luna en la posada del lobo
un descenso ante el abrazo oculto
Un caliz de sangre
De talla aúrea para mano ciega
Trovadores de sepulturas
Excavadores de las lámparas de rubí
Nace la tierra de la mano creadora
Profanado viaje de secreto llevado
Bajo la noche, hábitos de mil purezas
Ya te fue dicho, caballero
Llanto compulgido... Voces bajo la Orden de Leo
Madera pulida
Pina apuntada
Una flecha de pulso frío para un s-impulso
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